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Me siento soñador, tengo la idea
revuelta de proyectos que me espantan.
Mi casa es casi el cielo, una azotea,
y vivo como quiero, a la marchanta...
Mi vida se ha incendiado de bohemia
con un color rayano en inquietud,
mis versos son el pan, el pan que premia
tanta desolación y juventud.
Bohemio,
siento el placer más perverso
en comentar con mi verso
lo que calló a la amistad.
Bohemio,
nadie me ata y me mantengo
con la renta que no tengo
y que no tendré jamás.
Mi vida
nunca usó del acomodo
y si siempre empinó el codo
lo hago siempre... pa' variar...
pues creo
que es peor, pero más bello,
que ponerle a todo el sello:
moneda curso legal...
Yo sé del vil ensueño y la quimera
porque a cada momento los encuentro.
Lo malo es que me gozo por adentro
con cosas que practico por afuera.
Salí con la linterna y la apagaron,
la apagó la mujer de mi ansiedad,
y dicen que ando a oscuras, mas la erraron,
yo sé que me ilumina la verdad.